Contestando un post de Xavier Guell, me he dado cuenta que muchas veces, me había preguntado que sentía sobre mis sentimientos patrióticos, sin contestarme.
Estos días se esta viviendo un fervor popular patriótico por la Eurocopa 2008.
Me gustaría aclarar que es el sentimiento alegre y personal, del patriotismo que nos intentan transmitir e influenciar los medios tanto escritos como televisivos, por su único afán de vender, más descarado en algunos casos, por ser el único producto con audiencia en lo que llevan de año.
Te puede gustar el futbol (como es mi caso) pero de ahí a tener un sentimiento patriótico…..el camino es muy largo.
El sentido de la patria hoy en día es insostenible.
La mayoría de veces a lo largo de la historia, se ha usado el patriotismo para destruir en vez de construir.
El patriotismo ha usado la perdida de racionalidad en pos de un ideal, utilizado por un reducido grupo con intereses o poder para perpetuarse en el mismo, que normalmente suelen decidir el sentido de quien y no, lo es. El patriota ideal es aquel que no cuestiona, ni critica, ni piensa.
El sentido patriótico es un paso atrás en el intelecto de la persona, que impide la evolución universal de la humanidad.
Si definimos patriotismo como amor y orgullo, yo me reconozco patriota así como Mediterraneo, Barcelonés, Catalán y Español. Pero en ningún caso me niego a identificarme con un sentimiento que desde niño las instituciones nos imponen. Por qué debo sentirme más próximo a un catalán, español….que a un francés, alemán, chino, árabe o africano.
Es cierto que compartimos una historia, cultura, gastronomía y forma de hablar, pero eso no le da prioridad a ningún compatriota mío a ser considerado más importante que otro.
¡No soy patriota! Soy futbolero y del Barça. (sobre eso ya escribiré otro día), cierto es que me gustan todo tipo de competiciones deportivas y si España gana a Portugal, me alegraré, por cercanía e intereses mutuos con otras personas, no por patriotismo.
Seré patriota el día que se reconozca como única patria a la humanidad.
